4 de junio de 2013

Predicar con el ejemplo...

Acabo de pasar un día en un gran centro comercial y cada vez lo soporto menos, además comimos en un local en el que tú mismo, al acabar, tiras los restos de tu bandeja a unos contenedores que tienen habilitados. Se ahorran personal y no se separa ni se tiene en cuenta residuos: ¡Ahí va todo!.

Me pregunto: ¿Soy yo el que tiene un blog de Naturaleza?. 

Os aseguro que lo hago 3 veces al año, a primeros, mediados y Navidades...Pero ir relativamente poco no me remide... Mea culpa...

¿Mi conciencia verde me lo permite?. No, os lo aseguro... Sé que puedo dejar de hacerlo, igual que juré que no iría a los chinos y he cumplido.(Me dicen que me dará igual, que lo compraré en un establecimiento de mis vecinos y será "Made in China" y más caro, pero el dinero va a quién yo conozco, les digo).

¿Servirá de algo?

Siempre, por pequeña que sea la acción, ¡¡¡SIRVE!!!

¿Soy un gilipollas?.

Posiblemente, es más, estoy casi seguro.

Siento daros la vara con mis disyuntivas, me gusta compartirlas con vosotros.

Lo intentaré (Ir menos....Dejar de ir, no sé, puede que sea un caso perdido, ganado (ovino) para esta sociedad de consumo.)



Regalo salvaje de Kim Bel. 
UbuntuSalvajismo


Salvaje…

En mitad del panal de cemento me gritan: Eres un salvaje!
Si, soy un salvaje…Miro hacia el Sol recibiendo vida…y al anochecer observo a las estrellas como me circundan en el movimiento rítmico de un Cosmos infinito…SI, soy un salvaje.
Hablo con el mar y así puede entrar dentro de mi para explicar aquello mas profundo que se puede manifestar…pero SI, es así, soy un salvaje.
Camino en silencio para no ahuyentar al ave, ni la ardilla temerosa...Abrazo al árbol que me regala una sombra rodeada de mil relatos que se adentran mas allá del tiempo conocido…pero, SI, soy un salvaje!
Lloro ante la tristeza desnuda y sonrío al ver bailar la alegría sencilla….pero, lo confieso, SI soy un salvaje…
Grito contra la espada que corta respiraciones, y me tapo los oídos con el ruido ensordecedor de las máquinas que martillean la conciencia. Intento que los números no hagan cárceles tatuadas en la piel desnuda de trajes a medida y sin medida.
Clamo a las nubes un poco de paz, y a la Luna, el brillo nuclear que envuelve al espíritu.
Escucho como el alma tiene el mismo lenguaje en un lado y otro de fronteras alzadas por civilizadas reglas.
Pero, SI, tenéis razón….soy un salvaje…

                           




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